Se absorben rápidamente por lo que el nivel de glucosa en la sangre sube rápidamente y el nivel de insulina sube rápidamente.
Nuestro cuerpo no sabe manejar que la glucosa y la insulina suban tan rápido.
- Refrescos (sodas).
- Jarabes (siropes).
- Cereales de cajita.
- Arroz blanco.
- Pan, galletas y donas.
Y muchos otros alimentos procesados.