Dieta, ejercicio, masajes dolorosos, inyecciones de sustancias extrañas, pastillas, cirugías y mil cosas más, forman parte de las locuras que hacemos para bajar de peso. Quienes las hemos hecho realmente buscábamos bajar de peso sin sufrir, pero lo que encontramos en esas estrategias fue sufrimiento puro.
Bajar de peso sin sufrir es posible, pero hay que hacer la tarea.
Cuando me preguntan ¿qué haces para no subir de peso?, la mayoría de la gente espera que les dé mi dieta estricta de verduras y proteína, junto con mi rutina de 2 horas de ejercicio al día. Aún si hiciera eso (que no lo hago), compartirlo sería meramente informativo, porque las posibilidades de que alguien tome nota y haga eso, son casi nulas por 2 motivos:
- Vivir así es una locura insostenible, puedes tratar de hacerlo por unos cuantos días, meses tal vez, pero en poco tiempo te hartarías y mandarías la dieta y el ejercicio al olvido.
- Porque esa estrategia no sirve. El 98% o más de las personas que logran bajar de peso con esta estrategia para bajar de peso, recuperan el peso perdido en muy poco tiempo.
La única forma de bajar de peso sin sufrir es con amor y con conciencia.
Este es el primer paso, si te haces maestra del amor y de la conciencia, lo demás es extremadamente fácil.
Con amor, porque como te he dicho, te debes aceptar y amar hacia la transformación que buscas.
Con conciencia, porque si no le pones atención a tu cuerpo y a tu forma de comer, entonces no vas a saber qué es lo que necesita tu cuerpo, y no vas a saber cómo comer para no estar programándote para subir de peso con cada comida.
La dieta perfecta.
Yo sigo muchos grupos en Facebook de personas que quieren bajar de peso, lo hago para ir entendiendo cada vez más y mejor la mente del comedor.
En esos grupos me angustia ver cómo la gente se la pasa recomendando dietas para bajar de peso, dietas que están hasta mal balanceadas en macronutrientes esenciales, pero más que eso, dietas que son completamente insostenibles. Obviamente son dietas que empiezan un día, y a los 3 o 4 días ya se están quejando porque rompieron la dieta.
Queremos que alguien nos diga qué comer, queremos bajar de peso con la dieta “perfecta”, sin darnos cuenta de que la única forma de bajar de peso y mantenernos con ese peso bajo, es con la única dieta que nos puede servir a nosotras; esa dieta es la que cada una de nosotras debe diseñar y es especial para nuestro cuerpo.
Mi dieta no puede ser tu dieta. Somos diferentes y lo que es bueno para mi o lo que me ha servido a mi, no necesariamente va a ser bueno para ti o te va a servir a ti. Por otro lado, lo que me gusta comer a mí, no es lo que te gusta comer a ti, y si tu dieta no te gusta, la vas a botar en cualquier momento.
Cómo diseñar tu dieta perfecta
- Entendiendo que dieta no es el tipo de comida que necesito para bajar de peso, ¡NO!, dieta es el tipo de alimentación que necesito para estar sana.
Cuando estas sana, alcanzar tu peso sano es un efecto secundario.
- Aceptando nuestro cuerpo como es hoy y amándolo hacia la transformación.
- Tomando conciencia de nuestro cuerpo y de nuestra forma de comer.
Nos hemos mal acostumbrado a no tomar las riendas de nuestra salud, buscamos remedios fuera de nosotros, y tomamos pastillas, hacemos dietas de hambre que no podemos mantener más de unos cuantos días, y mil cosas más.
Debemos aprender a comer intuitivamente, escuchando a nuestro cuerpo para entender qué nos hace bien, qué nos hace mal, qué tiene una reacción positiva en mi cuerpo y qué tiene una reacción negativa.
Debemos aprender a ponerle atención a la comida, a hacer de la hora de la comida un momento sagrado en el que estamos nutriendo nuestro maravilloso cuerpo.
Debemos aprender a amarnos y a aceptarnos en el lugar en el que estamos hoy. No podemos perder lo que no es nuestro, hay que amar nuestro sobrepeso, amar nuestro cuerpo hacia la transformación.
Si quieres bajar de peso sin sufrir y mantenerte en ese peso bajo empieza a aceptarte y a amarte con conciencia plena.
Come de forma intuitiva enfocándote en buscar salud y no en huir del sobrepeso.
Con sólo hacer esos cambios vas a empezar a ver una increíble transformación, la cosa es hacerlos; la cosa es hacer la tarea.