La comida chatarra está específicamente diseñada para causar adicción. En su desarrollo se gastan millones de dólares para lograr que el cerebro no reconozca el haber comido y siga haciéndolo.
La leptina
El cuerpo humano no está hecho para tener grasa de más, una de las hormonas que ayuda a mantener el cuerpo en el nivel ideal de grasa es la leptina. Entre más grasa tenemos en el cuerpo más alto es nuestro nivel de leptina, y cuando el cerebro detecta un nivel alto de leptina manda la señal para dejar de comer; la señal de “estoy satisfecha”.
Para mantener un peso sano y un nivel de grasa corporal adecuado para que el cuerpo funcione correctamente, es indispensable que el cerebro escuche bien las señales de la leptina.
La comida ultra procesada o comida chatarra, que se encuentra generalmente en los pasillos centrales de los supermercados, está diseñada para bloquear la señal de la leptina, y si el cerebro no “escucha” a la leptina sigue acumulando grasa aun si tiene sobrepeso u obesidad.
La comida ultraprocesada bloquea la señal de la leptina.
Algunas empresas de la industria alimenticia manipulan la información para que lleguemos a conclusiones erróneas, por ejemplo: el yogurt es bueno para la salud pues tiene lactobacilos y la fruta es nutritiva; por lo tanto un yogurt con fruta es bueno. Pues no es así, un yogurt con fruta procesada tiene muchísima azúcar, y generalmente le añaden más grasa para mejorar su consistencia y sabor; de más está decir que el tipo de grasa que se le añade no es grasa buena. Esta combinación de azúcar y grasa lo hace adictivo, y además la cantidad de azúcar que tiene uno solo de estos yogurts es más que la cantidad recomendada para un solo día.
Desconfía de cualquier ultra procesado que se venda como saludable.
La mayor parte de los alimentos procesados tienen muchísima sal, azúcar y grasa, y esta combinación los hace altamente adictivos (estudio), la industria alimenticia lo sabe y gasta millones de dólares para lograr la “combinación perfecta” para que consumamos sus productos sin poder parar.
También usan un aditivo que se llama glutamato monosódico que intensifica el sabor, hace que la comida tenga mejor sabor y anula la sensación de saciedad, así logran que sigas comiendo y comiendo. Especialmente en los niños el glutamato los hace preferir los alimentos procesados, ¿te extraña que tu hijo prefiera una galleta de no tan buen sabor a una deliciosa manzana?, la culpa es del glutamato. Lo usan mucho en los restaurants de comida china, en botanas saladas, aderezos de ensalada, papas fritas, comida congelada preparada, pan de caja, embutidos, salsas, sopas preparadas, concentrados de salsa, galletas, sazonadores,etcétera.
El glutamato monosódico sintético tiene efectos terribles en la salud.
Algunos de los efectos secundarios al consumir glutamato son: entumecimiento en el cuello, brazos y piernas, destruye las neuronas, provoca ataques de pánico, te hace subir de peso, causa déficit de atención en niños y adultos, produce tos crónica, nauseas, arritmia, asma y más.
También se conoce como glutamato monopotásico, glutamato de magnesio, de calcio o de amonio, revisa las etiquetas nutricionales y evita los productos que lo contengan.
Saciedad sensorial específica.
Cuando comemos muchos sabores a la vez el cerebro entra en un estado que se conoce como saciedad sensorial específica, en donde se estresa y responde con ganas de comer más y más. Cuando reducimos cada comida a uno o dos ingredientes las ganas de seguir comiendo disminuyen considerablemente.
La saciedad sensorial específica es la guía de desarrollo de productos para la industria de la comida procesada.
Entre los productos “mejor desarrollados” están el refresco de cola y las botanas de maíz, especialmente las que son sabor a nachos. Estas mezclas al activar las papilas gustativas activan la zona de placer del cerebro de la misma forma en la que lo hacen algunas drogas ilegales; como además bloquean la comunicación entre el cuerpo y el cerebro haciendo que este último no reciba las señales de la leptina, son altamente adictivos y engordadores.
Otro de los productos “mejor desarrollado” para que sigamos comiéndolo sin parar, son los Cheetos ®, éstos son la envidia de la industria alimenticia pues es una de las comidas que más placer causan y como se deshacen en la boca le hacen “creer” al cerebro que no tienen calorías, por lo que podemos comerlos y comerlos sin sentirnos saciados.
“¡A que no puedes comer sólo una! no es sólo un slogan, es un reto que el fabricante de estas papas sabe que vas a perder pues están diseñadas para que la adicción sea tan fuerte que no puedas comer sólo una”.
Entre más comes este tipo de comida más la pide el cerebro, pues el efecto de placer se pierde a menos que comas más cada vez.
Así que ya lo sabes, somos el conejillo de indias de algunas empresas de la industria alimenticia.