La visualización creativa es una técnica comprobada en la que usas tu imaginación para crear lo que quieres en tu vida.  No hay nada nuevo en esta técnica, la usas todos los días sin darte cuenta.  Antes de hacer cualquier cosa, consciente o inconscientemente, la piensas, la imaginas y la haces.  Desde ir por un vaso de agua hasta crear un negocio, un viaje o una tarde de relajamiento.

Piensa en una manzana… ya estás imaginando.  Ahora con los ojos cerrados imagina la manzana con un par de alas de ángel volando en el cuarto en el que te encuentras. ¿Lo hiciste?, felicidades ¡acabas de visualizar!.

La mejor forma de predecir el futuro es creándolo.

Redes neuronales

Todos tenemos de 60,000 a 70,000 pensamientos por día; según los estudios el 90% de esos pensamientos son negativos, y no sólo eso, la mayor parte de esos pensamientos negativos son los mismos que tuvimos el día anterior.

Cada pensamiento forma una red de neuronas que se activan siempre juntas con ese pensamiento; si tienes un pensamiento recurrente fortaleces esos caminos neuronales hasta que quedan tatuados en tu cerebro y se activan de forma inconsciente.

¿Te ha pasado que si te preguntan la clave de tu teléfono o la contraseña del banco dudas, pero cuando tienes el teléfono enfrente o estas frente al cajero, la pones en automático?  Esto es porque tus neuronas están conectadas ya de forma predeterminada.  Cuando ves la pantalla del teléfono pidiendo la clave, la red neuronal se activa de inmediato y tu mano se mueve sin pensarlo para poner la clave. Esa conexión neuronal está tatuada en tu cerebro pues has repetido el mismo evento varias veces.

De la misma forma varios pensamientos recurrentes tienen conexiones neuronales muy fuertes que se activan solas.  Si el 90% de los pensamientos son negativos y la mayoría de ellos son recurrentes, imagina las conexiones neuronales negativas que tienes; no sólo activas sino extremadamente fortalecidas dentro de tu cerebro.

Esas conexiones neuronales fortalecidas son las que determinan tu vida pues estamos hechos de nuestros pensamientos.

Cada vez que tus neuronas se activan con un pensamiento el cuerpo responde con cierta química; la que ese pensamiento crea.

Uno de los ejemplos que más uso es este pues todos hemos pasado por aquí; cuando tienes un pensamiento estresante como “voy tarde a la junta de trabajo que es importantísima”  tu cuerpo reacciona con cierta química (la del estrés), y la reacción física a la química que genera este pensamiento es que te late más fuerte el corazón, se te acelera la respiración, entras en modo egoísta en donde lo único importante para ti es llegar a tiempo por lo que empujas gente en la calle, te enojas con los de la recepción, etcétera.

De la misma forma los pensamientos positivos activan cierta química especial.  Piensa en alguien a quien quieras mucho; tu hijo, sobrino, nieto, pareja, madre, quien quieras pero que sea alguien a quien ames profundamente.  Cierra los ojos por unos segundos imaginando a esa persona frente a ti.  De inmediato tu cuerpo reaccionó con la química de ese pensamiento y bajó tu nivel de estrés. Incluso se llega a sentir un calorcito diferente en el pecho ¿cierto?, esto es porque el nivel de estrés baja y dejas el estado egoísta para empezar a cruzar la puerta hacia un estado creativo.

Una forma rápida para empezar a tocar un estado creativo es a través del amor.

Así que cuando estés haciendo algo que necesite tu creatividad piensa en alguna persona amada y vas a conectar con tu creatividad rápidamente.

Esta es la forma en que los pensamientos influyen en tu físico pero, ¿qué hay de tu futuro?, ¿cómo influyen en tu día y en lo que creas cada día?

Pensamientos negativos

Regresando a los pensamientos negativos que tenemos durante el día, la mayor parte de ellos son acerca de nosotros mismos y esos son los recurrentes.  Uno de los pensamientos negativos recurrentes que la mayor parte de las personas tenemos es el de “no soy suficientemente bueno para…..”,… para mi trabajo, para que me amen, para que me reconozcan, etcétera.  Este pensamiento viene de la falta de seguridad.

El 100% de las personas se siente insegura en una o en muchas áreas de la vida.

Los pensamientos negativos automáticos se conocen como ANT (Automatic Negative Thoughts) y determinan qué tan mal nos sentimos, nos crean más inseguridad, enojo y eso nos genera más pensamientos negativos.  Entramos en un círculo vicioso con lo que se entiende que el 90% de los pensamientos que tenemos sean negativos.

El problema con estos pensamientos es que son creíbles, específicos e irreflexivos.  “No soy suficientemente bueno” es creíble pues generalmente nace después de que algo no sale como esperábamos, es específico pues está claro para qué no soy bueno, y es irreflexivo pues nunca nos detuvimos a analizar el evento o eventos con tranquilidad y evaluar que, sólo ese día, las cosas no salieron como esperábamos.

Si yo amanezco con ese pensamiento pues es de mis ANT (pensamientos negativos automáticos), es decir que se activa inconscientemente en mí, sin yo darme cuenta, y digamos que tengo una importante junta en donde voy a presentar mi trabajo de meses ¿cómo me va a ir en la junta de trabajo si tengo la certeza de que no soy buena?, ¿cómo me voy a sentir durante y después de esa junta?, ¿qué voy a hacer y decir en la junta?, ¿cómo lo voy a decir?.

Atraes lo que piensas.

Obviamente el resultado no va a ser bueno y voy a salir deprimida, sintiendo que no se reconoce mi trabajo y con resultados negativos que sólo van a fortalecer mi idea de que “no soy buena para…” , fortaleciendo así las conexiones que ya tengo creadas, tatuándolas con tinta indeleble y de forma más y más profunda.

Pero ¿qué pasa si yo escojo mis pensamientos y cómo me voy a sentir al salir de la junta de ese día?.  Obviamente no puedo escoger la reacción de mis compañeros o de mi jefe, pero sí puedo escoger lo que depende de mí.  Aún si la reacción de mis colegas no es la mejor yo sigo teniendo el control de lo que pienso y siento.

Si antes de ir a la junta pienso en lo bien que la tengo preparada, en lo buena que soy para presentar, en las extraordinarias ideas que voy a poner sobre la mesa, en la energía con la que me voy a presentar y en cómo me voy a sentir al salir, ¿qué resultados puedo esperar de la junta?, ¿qué voy a hacer y decir durante la junta?, ¿cómo me voy a sentir cuando termine?. Y digamos que la reacción de mi jefe no es la mejor, ¿con qué convicción y energía voy a defender mis ideas?, y si ni así los convenzo ¿voy a dejar que ese evento me marque, si sé que soy buena? Obviamente es un escenario completamente diferente al anterior.  Mi jefe y compañeros van a sentir mi energía desde que llego, van a quedar convencidos por mi forma de hablar, de presentar y voy a salir dando brincos de felicidad por un trabajo bien logrado y reconocido.

La cosa es que pensar o decirme cosas lindas en la mañana frente al espejo no es lo único que se necesita.  Tengo que entrar en mí y desactivar las conexiones neuronales negativas que tengo tatuadas para activar las positivas, pues las negativas se activan en automático; y esto se logra con la meditación y con la visualización creativa.

Cambia tus pensamientos de raíz.

Cuando entras en un estado meditativo las ondas cerebrales cambian y llegan a un nivel en donde somos más influenciables.  Esto no lo digo yo, es ciencia. Cuando te dices cosas lindas en el espejo estás emitiendo un patrón de ondas cerebrales que se conoce como Beta, que es cuando tenemos los ojos abiertos y estamos en contacto con el exterior.  Claro que decirnos cosas lindas al espejo tiene un efecto positivo,  pero de ese hablaremos en otra ocasión.    En el nivel Beta no somos influenciables y no estamos en contacto directo con nuestro subconsciente que es donde los cambios reales suceden.

Cuando cerramos los ojos, como cuando te recuestas en un sillón, entramos en estado Alfa y vamos acercándonos a un estado de calma y paz interior.  Si en un estado meditativo seguimos bajando el patrón de las ondas cerebrales llegamos al nivel conocido como Theta.  En theta estamos a nivel cerebral, a un paso del sueño; este es el estado ideal para programar tu mente y para reducir el estrés, hacerlo desde Alfa también funciona pero no con la misma fuerza.  Es tan fuerte llegar a este estado mental que es aquí en donde se trabajan las adicciones.

El estado theta se conoce como el estado de conciencia creativa.

Cuando estás en theta no hay estrés, y en el momento en que el cuerpo y la mente no tienen que estar en guardia para salvar la vida por lo que te haya motivado el estar estresado, dejan de estar en el egoísmo pues la vida ya está segura.  El estado egoísta al que nos lleva el estrés es natural pues si tienes que salvar tu vida lo único que importa eres tú, es una reacción de supervivencia del cuerpo y de la mente. Al salir de ese estado de egoísmo entras en un estado de creación; obviamente si estas estresado el ponerte a crear algo no es de las prioridades ni de tu mente ni de tu cuerpo.

En theta, sin estrés y en estado de creación, puedes fácilmente CREAR diariamente las conexiones neuronales positivas que quieras y también desconectar las negativas que existen.

Desactiva el pensamiento

Si quieres desactivar el pensamiento o creencia de que “no soy bueno para….” primero tienes que identificar que ese pensamiento lo tienes; una vez que lo haces consciente lo puedes desactivar, acuérdate que son pensamientos inconscientes así que si no los identificas no sabes que los tienes.

Ya que lo reconoces en ti, entonces debes decidir con qué pensamiento lo vas a sustituir pues va a seguir llegando, pero como ya lo tienes consciente ya puedes identificarlo cada vez que se active.  Una forma de reconocer cuando nos llega el pensamiento es identificar cómo nos hace sentir el tenerlo; como el pensamiento no lo vamos a reconocer fácilmente es más fácil que sí reconozcamos el sentimiento.  Cuando piensas que no eres bueno para… generalmente te sientes  apachurrado, o te ponemos de malas, o a la defensiva; tienes que identificar también cómo te hace sentir ese pensamiento. Ya que sabes qué pensamiento es y cómo te hace sentir llevas el 50% de avance para desactivarlo.

Después, vas a activar el pensamiento que lo va a sustituir pero en versión positiva, por ejemplo: “Soy una persona valiosa y mi trabajo se reconoce”.  Y el toque final, ¿cómo te sientes si tienes la certeza de que “soy una persona valiosa y mi trabajo se reconoce”? Seguramente alegre, seguro de ti mismo, jovial, irradias energía, buena vibra, etcétera.

En estado meditativo vas a analizar tu pensamiento negativo y el sentimiento que este te genera para quitarle fuerza y desactivarlo, y después vas a reemplazarlo con tu sentimiento positivo y con la emoción que este nuevo pensamiento te provoca.

Lo primero que tienes que hacer es bajar el patrón de tus ondas cerebrales a un nivel theta y para eso hay que entrar en estado meditativo, después vas a ver lo que ya no quieres ser, los pensamientos que ya no quieres tener y las emociones que ya no quieres vivir, esto para desactivar las conexiones neuronales que existen.  Una vez que lo hagas empiezas a crear; implantas el pensamiento positivo en tu mente junto con las emociones que te genera esa nueva creencia. Vas a vivir ese momento en tu meditación, pues la emoción de vivirlo es lo que va a decirle al cuerpo que ya está sucediendo, y es lo que va a reforzar las conexiones que estas creando.

Ese pensamiento negativo está tatuado en ti por la repetición, porque es un pensamiento recurrente que has repetido y repetido hasta que se grabó en tu subconsciente.  Para borrarlo y sustituirlo por el positivo tienes que hacer lo mismo; repetir y repetir el evento en un estado meditativo.

Al final siempre debes agradecer, todo en tiempo presente.  Al agradecer la experiencia también das por hecho que ya sucedió, ese mensaje recibe tu cuerpo y actúa como que ya ha sucedido.

En esta meditación vas a conocer los primeros pasos de la visualización creativa. Pasos que te sirven para cambiar un pensamiento negativo recurrente.

¿Te animas a intentarlo?.

Sólo tienes que decidir empezar a ser hoy mejor que ayer.

Da clic en la meditación y empieza a escucharla, te recomiendo el uso de audífonos.